Llévame al partido

Es el clásico pasatiempo americano: nueve jugadores, nueve turnos para batear e innumerables héroes y rivalidades. El béisbol tiene fanáticos por todo el mundo, pero los ciudadanos de Manhattan no necesitan viajar lejos para ver un equipo bueno o un estadio espectacular. La Cancha de Frank Myers en el Estadio de la Familia de Tointon es la casa del equipo de béisbol de Kansas State University y satisface a los fanáticos con una experiencia buenísima.

Los meses invernales dan una imagen deprimida del estadio. El césped es seco, las gradas de aluminio están vacías y hay una falta de banderas ondeando en el viento. Es durante los meses primaverales y veranales que el estadio es un hervidero de fanáticos. Antes de entrar al estadio, las personas ven una fachada de caliza de Kansas para unificarlo con las otras fachadas del campus. Se puede oler las saladas palomitas de maíz a kilómetros de distancia y la dulzura del algodón de azúcar entusiasma a los niños. Después de una lucha por la muchedumbre en ropa morada, la cancha aparece y el latido del corazón se apresura con emoción. Ahora es posible ver todos los aspectos de la cancha.

El césped de los jardines que estuvo muerto durante el invierno se ha sido convertido en césped perfecto. No hay irregularidades en la altura o en la apariencia. Las líneas de la cortadora de césped se cruzan perfectamente. Es tan verde como el dinero. Si uno de los fanáticos quisiera tocarlo, sería blando, como fieltro, al tacto. Las líneas de creta blanca crean límites que pueden ser una amiga o una enemiga para los jugadores. Las tres bases están sentadas en la marrón suciedad como esponjosos malvaviscos.

Detrás del muro en los jardines hay un grupo de pinos. Las luces eléctricas altas iluminan todo el estadio y el campo. Es como hay luz del sol por la noche. El marcador en Tointon es electrónico y no requiere humanos para cambiarlo y el resultado es actualizado en números y letras digitales. Los fanáticos siempre murmuran silenciosamente y gritan en voz alta cuando hay un evento importante en el partido.

Las vistas hermosas, los sonidos emocionantes y los olores sabrosos de la Cancha de Frank Myers crean una experiencia memorable y entretenida. ¡Juegue al béisbol!

Fotografía: Personal